Los iones metálicos no controlados (hierro, cobre, manganeso, calcio y otros) en su producto o proceso pueden acelerar las reacciones químicas que provocan la pérdida de tiempo de inactividad del producto y del equipo. Nuestros agentes quelantes de metales pesados pueden ayudar a prevenir eso.

Los quelatos se pueden agregar a los productos de consumo terminados y en los procesos para abordar problemas que los iones metálicos pueden causar, que incluyen degradación, decoloración, precipitación, inestabilidad de emulsión y rancidez. También abordan el sarro, la degradación y las reacciones químicas no deseadas, lo que mejora las operaciones.

Nuestros quelatos pueden utilizarse para mejorar el rendimiento de productos como vitaminas y micronutrientes vegetales, así como limpiadores para el hogar, industriales e institucionales. Y como son eficaces en concentraciones notablemente bajas, nuestros agentes quelantes pueden reducir los costos operativos y de materiales.